CARTA ABIERTA DE LA PAMPA

EN EL 24 de MARZO de 2010[1]

Esta semana se está desarrollando en La pampa la Semana de la Memoria, todas las actividades se relacionan con hechos que llevaron al cruento golpe militar del 24 de marzo de 1976.
Nos preguntamos: cuál es la importancia de la memoria, aquella que nos permite la reconstrucción de hechos vivido en forma individual, pero también los hachos que fueron reconstruidos a través del contexto social, las narraciones, las lecturas, las imágenes
El tiempo fluye y en este discurrir los acontecimientos toman dimensiones y resignificaciones.
Es a partir del análisis de nuestro pasado inmediato y relacionado con la fecha de hoy, la memoria nos lleva a analizar todos los acontecimientos previos que fueron abonando el terreno para llegar al golpe militar

La historia nos cuenta que a comienzos de 1975, cuando era Presidenta de la Nación, Isabel Martínez de Perón, se produjo un agravamiento de la situación económica, causada por la suspensión en el Mercado Común Europeo de las compras de carnes argentinas, que llevó a la devaluación del peso, la caída de los salarios reales y el aumento de reclamos sindicales
Celestino Rodrigo, nombrado Ministro de Economía instrumenta su famoso plan económico recordado como “el Rodriogazo”: devaluación superior al 100%, el aumento de los precios del combustible del 175%, de las tarifas eléctricas el 75%, y aumentos de otros servicios públicos.
Pero fue necesario perseguir a intelectuales, artistas y activistas sindicales considerados de izquierda para imponer las medidas y frenar las protestas. Esta persecución ilegal fue llevada adelante por personajes clandestinos organizados en la Alianza Anticomunista Argentina (AAA) dirigidos desde el Ministerio de Bienestar Social a cargo de la principal figura del peronismo, José López Rega.

Cuando Ítalo A. Luder asume provisoria mente el cargo de presidente por enfermedad de Isabel, nombra ministro del Interior a Ángel F. Robledo quién envía al Congreso el proyecto de creación del Consejo de Defensa Nacional y de Seguridad Interior que entregaba a los militares la responsabilidad total de la lucha contra la subversión armada.

Muchos empresarios comenzaron a estimular un golpe militar. Así como algunos integrantes de partidos políticos percibieron el crecimiento de organizaciones políticas izquierdistas, con estrategias de poder sustentadas en esas luchas, las comisiones internas más activas, mientras se debilitaba la influencia de los partidos tradicionales. El jefe del partido radical, Ricardo Balbín, respondió "no tengo soluciones" al reclamársele una alternativa frente a un posible golpe militar
El 12 de diciembre de 1975, hubo un primer pronunciamiento fallido del brigadier Orlando Capellini, a pesar de los fallido del golpe los estratos medios de la sociedad reflejaron que no se opondrían a un golpe, dado que fue tomado por una lado con simpatía y por otro con indiferencia,, apoyados por los medios periodísticos que planteaban la necesidad de poner orden, fin a la corrupción y facilitar el advenimiento de un gobierno menos incapaz que el de "Isabelita"...

Todo estaba preparado y como dice Rodolfo Walsh en su Carta Abierta de un escritor a la Junta Militar
…..“El 24 de marzo de 1976 derrocaron ustedes a un gobierno del que formaban parte, a cuyo desprestigio contribuyeron como ejecutores de su política represiva, y cuyo término estaba señalado por elecciones convocadas para nueve meses más tarde. En esa perspectiva lo que ustedes liquidaron no fue el mandato transitorio de Isabel Martínez sino la posibilidad de un proceso democrático donde el pueblo remediara males que ustedes continuaron y agravaron.”…


[1] Noemí S. Olivera

Tapa del diario Clarín del 25 de marzo de 1976: “total normalidad”... No es tan difícil entender por qué siempre los dueños de este diario estuvieron del lado de aquellos que reprimen al Pueblo...